Siluetas, apenas sombras.

Siluetas, apenas sombras de personas corrientes haciendo actividades normales, solo viviendo, ocupándose de sus cosas. Ningún valor extraordinario más que el de ser personas fugaces.

Siluetas, apenas sombras es lo que queda de cada una de las personas que vivimos vidas normales, sin aspiraciones de importancia extraordinaria ni de dejar constancia en la posteridad.

Siluetas, apenas sombras y, sin embargo cuántas dificultades, qué de sacrificios, cuánto esfuerzo, coste, lucha, logros, alegrías, explosiones de felicidad y de angustia, sinsabores, amarguras, placeres y dolores, esperanzas y desesperanzas, deseos, conquistas, renuncias, fracasos, anhelos y desapegos, idas y venidas, llegadas y partidas, holas y adioses, abrazos y portazos...y la presencia permanente de la muerte.

Siluetas, apenas sombras.

Pero nuestras sombras.