Fotografiada enfrente de la embajada rusa de Madrid en una protesta contra la invasión de Ucrania.
Oksana lleva viviendo 18 años en España, en Madrid. Es limpiadora aunque en su país era bibliotecaria.
Vive aquí con su marido, también ucraniano.
El resto de su familia está en Ucrania, su madre de 72 años, su padre de 80, sus dos hijos, ella de 31 y él de 29, su sobrino hoy cumple 26 años. Dice que ninguno de ellos quiere salir de Ucrania y que están colaborando en la medida de sus posibilidades. Su madre hace comida para los refugiados y familiares, sus hijos son voluntarios en la defensa.
Quiere que los rusos se vayan a su país y la libertad y la paz para sus hijos y familiares. Oksana dice que la mayoría de los ucranianos de origen ruso están en contra de la invasión aunque en 2014 apoyaran la agresión rusa. Denuncia que el primer día de la invasión los saboteadores prorusos utilizaban a niños ucranianos para hacerles marcar objetivos con tiza como un juego.
Está convencida de la victoria de Ucrania.